En menos de 10 horas, Patricia pasó de ser una tormenta tropical, a un “monstruoso huracán de categoría cinco”, la máxima en la escala de Saffir-Simpson, destacó la organización Oxfam.

Alertó que en 48 horas lloverá al 40 por ciento de lo que llueve en todo el año en las regiones afectadas, por lo que México ya se encuentra preparado para atender a la emergencia.

“Tan pronto Patricia toque tierra en las costas del Pacífico, Oxfam México realizará la evaluación de los daños y determinará de qué manera podrá atender a la población afectada”, comentó Ricardo Fuentes-Nieva, director Ejecutivo de Oxfam México.

Por esta razón, dijo, el equipo de Oxfam México ya se encuentra evaluando la situación humanitaria, para determinar de qué manera podrá dar atención a la emergencia.

“Como especialista en agua y saneamiento en emergencias, Oxfam está centrado en la ayuda inmediata para las personas afectadas y envía suministros relacionados con esta especialidad”, detalló.

Señaló que el envío consta de depósitos flexibles que permiten almacenar grandes cantidades de agua, cubos para que la gente pueda recoger agua y llevarla hasta sus casas y placas para construir letrinas de emergencia, así como plásticos para construir albergues.

Según la Organización Meteorológica Mundial, los vientos de Patricia son lo suficientemente fuertes como para levantar un avión y mantenerlo en el aire.

Se espera que Patricia siga siendo un huracán extremadamente peligroso de Categoría cinco, la más alta, y que toque tierra en algún momento de la tarde o noche de este viernes, 23 de octubre.